Sofía
Gómez, de 22 años, llegó al área de urgencias de la Unidad de Servicios de
Salud (USS) El Tunal con una grave infección en sus glándulas mamarias,
producida por una bacteria, tras realizarse un procedimiento estético con
biopolímeros para aumentar el tamaño de su busto.
El
avanzado proceso infeccioso puso en peligro su vida, a tal punto que permaneció
cuatro días en estado de coma, pero gracias a la oportuna intervención del
cuerpo médico y de especialistas de la USS El Tunal, logró sobrevivir y hoy se
recupera satisfactoriamente.
César
Barrera, cirujano plástico explicó la situación de la paciente: “Esta persona
presentaba fuertes dolores en su pecho y la infección comprometía todo su
cuerpo, entonces creamos un equipo médico-quirúrgico para salvarle la vida, que
era un reto porque estábamos luchando contra el tiempo”. Además de
estabilizarla en el área de urgencias, a la paciente se le practicó
desbridamiento, lavado quirúrgico, resección costal y un implante de matriz
dérmica; utilizando tecnología de punta y sistemas modernos que han favorecido
la recuperación de la paciente.
“Tuve
una alta probabilidad de morir, nosotras nos hacemos estas intervenciones
quirúrgicas en clínicas de garaje por el afán de vernos bonitas; además, me
cobraron 800.000 pesos por la cirugía y nunca pensé en el daño que le podía
hacer a mi salud”, comentó Sofía, integrante de la comunidad LGBTI, quien se
recupera en el área de hospitalización de la USS El Tunal.
Ya
controlado el proceso infeccioso y con tejido apto para cobertura, los especialistas
esperan que transcurran tres semanas desde la aplicación de la matriz dérmica
para proceder a realizar un injerto de piel.
La
atención y el servicio de los médicos, cirujanos y enfermeras ha sido
excelente” declaró Sofía, quien desde su llegada a la USS El Tunal ha contado
con la intervención permanente de nuestro equipo de cirugía plástica, cirugía
de tórax, urgencias, unidad de cuidados intensivos, medicina interna, enfermería,
nutrición y terapia.